La adecuación de este parque público se llevó a cabo mediante la ejecución de un gran anfiteatro de 380 m2 a  partir de tarima antideslizante de pino norte. En la esquina opuesta se construyó una gran rosaleda (pérgola) de 260 m2 en madera maciza de iroko teñida en color caoba. Esta estructura alberga parte de las luminarias del parque. El conjunto lo completa un quiosco con sus paredes revestidas de lamas de madera.